martes, 25 de mayo de 2010

Carta de algun niño enamorado

Hola niña:
Justificar a ambos lados

Espero que estés de lo mejor. Espero que las modas aún no te conquisten. Sabes, las modas son malas, son impuestas en gran parte por la música, y ésta por la televisión, y ésta apesta. Y sabes otra cosa, desde que se acabó la complejidad de la mente, se acabó la complejidad en la música. Eso lo escuché un día de una persona que lloraba.


Bueno, no sé, tal vez no me recuerdes. Yo mismo no recuerdo que edad teníamos. Lo único que recuerdo es que yo era un poco mayor que tú. Yo me acuerdo más de tí de lo que tú de mi, de eso estoy seguro.


Pasabamos horas y horas jugando frente a tu casa. Siempre te extrañaba cuando te ibas de viaje, y yo no quería que acabaran las vacaciones pues significaba tener que ir a la escuela y tú, seguramente, jugarías con alguien más.


Recuerdo aquél día cuando jugabamos frente a tu ventana, tú traías una muñeca, yo un par de cochecitos y me dijiste, "¿fugamos al poso y la posa?", y yo no entendí y te pregunté "¿Qué? ¿qué dices?", a lo que de inmediato contestaste e hiciste un certero ademán para que yo entendiera qué era lo que querías decir, "sí, al poso y la posa, pimelo tu me bechas y luego yo, y tu te vas a tlabajal y yo cuido a la bebita".


Era un niño de seis años (creo), ¿se supone que debía enamorme de una de seis?... Pues no, me enamoré de tí, que tenías no más de tres (creo). Dicen que cuando uno madura el amor pierde todo sentido. Sigo siendo un niño, y hasta que deje de serlo dejaré de estar enamorado de tí.


Hace unos días volví a verte, me saludaste. Quedé hipnotizado, de ahí que no recuerde todo lo demás que me dijste, después del hola. Parece que la adolescencia te favorece. Mientras yo voy saliendo de ella, parece que tú empiezas a soñar, y empiezan a hacerte soñar.



Espero que estés bien, que disfrutes éste tiempo de tu vida. Quizá te vuelva a escribir, no es necesario que me contestes.


Atte. Algún niño enamorado de tí.

2 comentarios: