jueves, 8 de julio de 2010

"Saquemos algo de lo que guardamos"

Hay que desconectar el cargador de las laptops cada vez que la batería está llena, pues es inútil y hasta cierto grado perjudicial, el tenerlo conectado a toda hora. Estoy en contra de quienes gastan la energía eléctrica a lo cabrón. Sin tener ninguna consideración. Es cierto que ellos pagan, pero ya no se trata de eso. En estos últimos años, me he declarado colaborador activo de un medio ambiente adecuado para que nuestra vida siga su curso. Me he dado a la tarea de educar con el ejemplo, hasta donde mis ejemplos me permiten, considerando el dar argumentos convincentes del porqué de ese amor y cuidado hacia nuestro planeta.

Pero como en todo proceso de evolución, se dan las posturas e ideas contrarias, la lucha de condiciones socio económicas culturales contrarias, también he llegado a pensar que en realidad no sirve de mucho esforzarse por elevar el nivel de vida. Comprendiendo por nivel de vida, al hecho de sentirse a gusto con el aire que se respira, con los árboles que se mueven al son de un baile con el aire. Nadie entiende, parece que nadie puede, o nadie quiere.

El argumento principal para mi postura como verde ecologista (sin implicaciones políticas, claro), es: “tengo sueños, que quiero ver cumplir”. Un día parece que se van. Parece que lo único que has hecho es perder el tiempo, con ideas pendejas, diciendo siempre cosas pendejas, pues se esperaría que la gente reaccionara. Pero, ¿Cómo se supone que alguien como yo, que con argumentos tan pequeños a comparación con la enormidad de los medios con los que la gente alimenta su coeficiente intelectual todos los días, va a cambiar la forma de pensar de un montón de individuos e individuas, que parecen no entender, cuando lo peor es que parece como si yo mismo no me entendiera?

Muy poca gente confía en alguien como yo, he tenido que irme adaptando a eso. Un día un amigo, al que ya no sé si puedo o si tengo el derecho de considerarlo mí amigo me dijo que la amabilidad está ante todo, que es la que abre puertas. Esto incluye sonreír cordialmente, saludar con la sonrisa, agradecer por todo, etcétera, etcétera. De la forma más amable y encarecida pido que si no se me entiende, se me comprenda, o mejor aún, se me compadezca. No quiero que parezca que me estoy haciendo la víctima, aunque si eso parece, no es mi culpa.

Ya no hay quien pague a alguien por decir verdades, por estudiar comportamientos, sociedades, instituciones y consecuencias en las actitudes de individuos al relacionarse con otros. Algo así es lo que yo hago y quiero seguir haciendo. Me encuentro en un lugar en el que me es casi imposible poder concentrarme, si no son los coches, son los camiones, o son las voces, mis llamados, la gente que quiere hacerse notar subiendo el volumen a su música. No me queda más que mirarlos feo como diciéndoles hay alguien queriendo concentrarse ¿Podrían bajarle a su música de mierda? O, ¿Me dan permiso de matarlos?, yo quiero leer ¿sabes lo importante que es para mí y para el mundo el hecho de que alguien lea?Pero es obvio que no saben. Y es claro también que no les interesa saber. Son iguales a mí, egoístas, pues no termino de comprender que así como yo tengo mi espacio y mi tiempo, ellos tienen el suyo. Pero es tan difícil, donde terminan tus derechos, comienzan los de los demás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario